Todos los contenidos de este libro giran en torno al humanismo: el tipo de pensamiento que, desde distintos y aun opuestos puntos de vista, pone al hombre en el primer plano de la cultura o le asigna una posición especial en el conjunto de las cosas. Carecen de razón suficiente quienes opinan que ha llegado el momento de superar los humanismos, de trascenderlos en un transhumanismo o posthumanismo. Somos más que el producto de procesos físico-químicos, biológicos, psicológicos o sociológicos. El hombre concreto, el de carne y hueso en expresión de Unamuno, participa de todos los órdenes del ser y sintetiza en sí mismo, de manera unificadora y dinámica, aspectos del mundo mineral, vegetal, animal y espiritual. Cuerpo y espíritu se abrazan en una síntesis espléndida, cuyo enigma no ha sido, aún, plenamente descifrado. El error de algunos humanismos no consiste en afirmar el alto valor del hombre, sino en tender a considerar al hombre como bastándose a sí mismo. En la páginas de este libro se proponen algunos posibles caminos hacia un humanismo integrador y esperanzado, a fin de superar la crisis actual del pensamiento humanista.