¿Orar es como llamar a un call center celestial? ¿Te dejan en espera con música de arpa y nadie te responde? Este libro te enseña que Dios no opera con un menú de opciones ni te pone en buzón de voz. Explora la oración de una manera fresca y divertida, desde la súplica desesperada hasta la alabanza desenfrenada. Descubre por qué el silencio no es abandono y cómo tus peticiones pueden ser más sabias que simplemente pedir la eliminación del lunes en el calendario. ¡Prepárate para conectar con el Creador sin miedo a que te deje en visto!